La cosmética natural tiene un argumento de base diferencial que es la utilización de ingredientes de origen natural, obtenidos de plantas, animales, microorganismos o minerales, que han pasado por un procesado con mínimos aditivos químicos, sin emplear productos químicos ni derivados del petróleo. Sí pueden ser obtenidos por procesos físicos, reacciones de fermentación de la naturaleza u otros procesos que incluyen los tradicionales sin modificación química intencionada.
Un ingrediente sintético, en cambio, es una sustancia o material producido por procesos químicos y que no existe en la naturaleza. Ingredientes sintéticos son, por ejemplo, el aceite mineral (Paraffinum Liquidum), propilenglicol, dimeticona y dióxido de titanio.
Algunos ejemplos de ingredientes naturales son: aloe vera, extracto de caléndula, cera de abeja, cera carnauba, aceite de oliva, aceite de jojoba, manteca de Karité, aceite de argán o el ácido hialurónico que es de origen natural pese a que su procesamiento posterior es por biofermentación.
Otros ejemplos de ingredientes naturales derivados son: glicerina, escualano, dihidroxiacetona, aceite de oliva hidrogenado, cocamidopropilbetaina, entre otros.
También están los ingredientes naturales minerales como: oro, mica, sal marina o polvo turmalina.
Es importante recalcar que "natural" no es sinónimo de "seguro" y que, la cosmética natural no es más eficaz que la no natural, sino que la eficacia de un cosmético depende de la composición del cosmético en cada caso y de la biodisponibilidad de los ingredientes, la frecuencia de aplicación, etc. Es por este motivo, que en la Farmacia Verge, nos ponemos a vuestra disposición para ayudaros a resolver dudas, elegir el mejor cosmético que se ajuste a vuestros intereses y necesidades.