La relación existente entre la concentración  de glucógeno muscular y la capacidad de mantener el ejercicio  físico prolongado a una intensidad elevada ha  conducido a la práctica de varios experimentos para obtener un método con el que los músculos se puedan llenar al máximo antes de una competición. 

Una de las primeras experiencias consistió en correr durante dos o tres días hasta el agotamiento, en la semana de competición, mientras se ingería una dieta muy baja de carbohidratos.  A los tres días los músculos estaban vacíos de glucógeno; en este momento se comenzaba una dieta muy rica en hidratos de carbono y las biopsias musculares demostraros un fenómeno de “supercompensación”, es decir, los músculos se llenaban más de lo que estaban antes y puesto que estos días se pasaban en reposo absoluto, en el momento de la comida  los depósitos estaban llenos al máximo. 

Sin embargo, pronto surgieron ciertas críticas sobre este método. El correr hasta el agotamiento en la semana de la competición, hace aumentar el riesgo de lesiones  en un momento crítico. Si además los músculos están deprivados de glucógeno, el peligro es mayor.

Recientemente se ha modificado esta dieta de la forma siguiente: 

• Durante tres días se ingiere una dieta mixta en la que se toman el 50%  de calorías derivadas de los hidratos de carbono.
• Seguidamente, los tres días restantes se eleva el contenido de hidratos de carbono a un 70% del total de calorías diarias.
• En estos tres días también se descansa o se hace un entrenamiento corto y de baja intensidad. Las biopsias musculares demostraron unos niveles de supercompensación  similares a los del método anterior.

Este método modificado tiene la ventaja de que el corredor no tiene que correr hasta el agotamiento, sino que puede seguir su pauta normal.

Este régimen modificado es, sin embargo, recomendable tanto para los deportistas de élite como para los que no lo son, junto con una disminución progresiva del kilometraje o tiempo de entrenamiento y uno o dos días  de reposo antes de la competición. 

Este mayor nivel de glucógeno muscular no permitirá correr más deprisa al atleta, pero el ritmo alto de rendimiento podrá mantenerse por más tiempo.

Si te ha gustado esta entrada no te pierdas las siguientes que hablaremos de la alimentación el día de la competición, durante y después. 

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